El oficialismo no logró avanzar con las candidaturas impulsadas por el presidente Javier Milei. La votación terminó 39 a 29 en contra de los aspirantes propuestos para ocupar cargos en el máximo tribunal.

En una sesión cargada de tensiones políticas, el Senado de la Nación rechazó los nombramientos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla para integrar la Corte Suprema de Justicia. La decisión se concretó con 39 votos negativos frente a 29 afirmativos, en una sorpresiva alianza entre el PRO y el kirchnerismo que dejó al oficialismo sin el respaldo necesario para avanzar.

La propuesta había sido impulsada por el presidente Javier Milei, quien buscaba cubrir vacantes en el máximo tribunal. Sin embargo, las divisiones internas en la oposición y el descontento en algunos sectores del propio oficialismo frustraron la aprobación. El rechazo marca un fuerte revés para el gobierno nacional en su intento por reformar la composición de la Corte.

Entre los argumentos esgrimidos, varios senadores cuestionaron la falta de consenso político, la idoneidad de los candidatos y el momento elegido para el debate. El resultado complica la estrategia judicial del Gobierno y reconfigura el tablero de negociaciones en el Congreso.