En una jornada marcada por intensos debates y tensiones políticas, el Senado rechazó de manera contundente el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023, firmado por el presidente Javier Milei en diciembre pasado. Este revés legislativo representa un golpe duro para el gobierno de La Libertad Avanza, que actualmente enfrenta una crisis interna exacerbada por la controversia entre la Casa Rosada y la vicepresidenta Victoria Villarruel.

El DNU, que buscaba implementar medidas de desregulación económica, fue rechazado en la Cámara alta con 42 votos en contra y solo 25 a favor, contando además con 4 abstenciones y la ausencia de un senador. A pesar de ello, el decreto seguirá en vigor hasta su tratamiento en la Cámara de Diputados, a menos que se presenten obstáculos legales que ya han surgido en algunos aspectos. Si la Cámara baja también lo rechaza, las disposiciones de Milei quedarán sin efecto, mientras que su aprobación mantendría las medidas vigentes.

Este resultado agudiza las tensiones entre el Gobierno y el Congreso, especialmente después de la reciente reunión en la Casa Rosada entre gobernadores y representantes del Poder Ejecutivo. La oposición, liderada por Unión por la Patria y respaldada por senadores provinciales, así como los radicales Martín Lousteau y Pablo Blanco, logró poner en jaque al DNU presidencial después de más de siete horas de sesión.

La incertidumbre política se intensifica en medio de este revés legislativo, mientras el oficialismo busca alcanzar acuerdos con las provincias para avanzar con un nuevo paquete de leyes orientadas a la reforma del Estado.