El piloto argentino largó 14°, llegó a estar 11° y terminó 15° en su quinta presentación en la Fórmula 1. Fue protagonista de dos maniobras polémicas, recibió una penalización y volvió a evidenciar las limitaciones del Alpine.

Franco Colapinto completó una intensa carrera en el Gran Premio de Austria, donde partió desde el 14° lugar y cruzó la meta 15°, en una jornada marcada por toques, sanciones y una estrategia que no dio los resultados esperados. El argentino esquivó un incidente en la largada que dejó fuera a Verstappen y Antonelli, y llegó a posicionarse 11° en el inicio, apostando a un ritmo fuerte con neumáticos blandos.

Sin embargo, una parada lenta en boxes y el bajo rendimiento del Alpine lo relegaron. En la vuelta 31, Tsunoda lo tocó en plena lucha por la posición y le provocó un trompo; el japonés fue penalizado con 10 segundos. Más adelante, en la vuelta 55, Colapinto se cruzó con Oscar Piastri al salir de boxes y lo obligó a salirse de pista sin querer, lo que le valió al argentino una sanción de 5 segundos.

A pesar de los contratiempos, el piloto de Pilar mostró buen ritmo de carrera y se mantuvo en ritmo parejo con su compañero Pierre Gasly, quien terminó 13°. Aun así, el Alpine no mostró mejoras sustanciales y los puntos siguen siendo una meta lejana en términos reales de competitividad.

La carrera fue dominada por McLaren, con un sólido 1-2 de Lando Norris y Oscar Piastri. Para Colapinto, fue otra prueba de fuego y aprendizaje en su camino dentro de la máxima categoría del automovilismo mundial.