Este domingo por la mañana, una fiesta clandestina tipo “after” con alrededor de 200 personas fue desactivada en el barrio Juramento, tras denuncias de vecinos que reportaron el evento a las autoridades. La celebración se llevaba a cabo en el patio de una vivienda ubicada en la calle Calabria al 3600, donde se había montado una barra de bebidas alcohólicas, máquina de humo, DJ y gazebos, transformando la propiedad en un improvisado boliche.

El evento, que comenzó cerca de las 5 de la madrugada, alteró la calma de la cuadra con el ruido de música, autos estacionados y el bullicio de los asistentes. Vecinos de la zona alertaron a las autoridades, y agentes de Inspección General se presentaron en el lugar para poner fin a la fiesta clandestina.

Marcelo Cardoso, titular de Inspección General, explicó que la fiesta había sido promocionada en redes sociales, con entradas anticipadas a la venta. Cardoso subrayó que estos eventos, además de perturbar la tranquilidad del vecindario, presentan riesgos de seguridad por la falta de medidas adecuadas. Advirtió que la afluencia de jóvenes en estas condiciones, muchos de ellos alcoholizados y en autos mal estacionados, agrava la situación en la vía pública y en propiedades ajenas.