El gobernador Axel Kicillof abrió el 153° período de Sesiones Ordinarias de la Legislatura bonaerense con fuertes cuestionamientos a la gestión presidencial.

Kicillof afirmó que el Gobierno nacional no solo busca achicar el Estado, sino desmantelarlo, debilitando a la comunidad. "El Gobierno provincial actúa como escudo para proteger derechos y sostener el tejido social", sostuvo.

Advirtió sobre "un hecho de inédita gravedad institucional" y denunció amenazas desde la Nación para intervenir la Provincia. "No permitiré que el destino de los bonaerenses quede librado a la improvisación de un presidente que no respeta la democracia", afirmó.

Seguridad, educación y salud

Kicillof anunció una inversión de $170.000 millones en seguridad, con 800 nuevos patrulleros y la creación de un Fondo Municipal de $70.000 millones. Además, reafirmó su compromiso con la educación pública y la inauguración de 50 nuevas escuelas. En salud, destacó la apertura de 175 centros de atención primaria y pidió a la Legislatura aprobar la creación de la Empresa Pública de Emergencias y la de Medicamentos Bonaerenses.

Obra pública y legislación

El Gobernador criticó la paralización de obras por parte de la Nación y aseguró que la Provincia continuará con la inversión en infraestructura. También solicitó a la Legislatura aprobar leyes clave en materia de presupuesto y endeudamiento, y reclamó definiciones sobre las PASO.

Llamado a la unidad

Para cerrar, instó a la cooperación política en defensa de la democracia. "El futuro no es del presidente, es del pueblo", concluyó.

Asistieron la vicegobernadora Verónica Magario, el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Alexis Guerrera, funcionarios, intendentes, legisladores y representantes gremiales.